jueves, 22 de julio de 2010

Relatos del Relator

Al Relator de las Naciones Unidas le tomó poco tiempo hacerse una muy buena idea de lo que sucede en el Ecuador. Los personeros criollos de los DDHH se regodeaban por sus "descubirmientos" de actos de lesa humanidad en la época de Febres Cordero. No obstante, para el Relator está muy claro que la mayoría, (si no es que todos) de los casos de asesinatos actuales catalogados como “ajustes de cuentas” han quedado en el olvido y sus autores en la impunidad. El enviado especial va más allá: infiere que estos casos son ejecuciones extrajudiciales, en donde la policía posiblemente ha pecado, ora por comisión, ora por omisión. Además concluye que la inseguridad en el país obedece en mucho a la negligencia, a la desidia, o las voluntarias o involuntarias omisiones de la institución policial, apoyadas por la nula, incompetente y parcializada acción de la fiscalía y su probo representante que pasan dedicados a las relaciones públicas. Eso demuestra que nuestros voluntariosos elementos de los DDHH y sus pírricas comisiones de la verdad en Ecuador son unos entes parcializados, limitados y cargados de un pusilánime espíritu que les impide investigar a todos, caiga quien caiga. Su temor a perder el platito de lentejas que les llega de Carondelet ha sido evidenciado por un “burócrata internacional” (Pesántez dixit) que no teme decir las cosas como son.

sábado, 10 de julio de 2010

Caldito Instantáneo

Jalkh el hombre del consomé instantáneo de estadística nos cuenta ahora que su sabia imposición (que pisotea el libre albedrío de las personas) ha rendido sus frutos de manera precoz. Las comadres y vecinos de aquellas familias escandalosas y violentas ya le han ido a contar al ministro cual verdad absoluta, que la violencia intrafamiliar ha disminuido desde que el trago se vende en días hábiles y se lo consume en horarios diferidos. Seguramente oficiosos agentes de la robo-lución, asalariados con dineros del erario público, se apostaron en los plenamente identificados hogares disfuncionales a los que el maldito trago ha carcomido y destruido. Realmente que el espíritu revolucionario exalta otras virtudes inhumanas como la sandez. ¿En base a qué estudios o estadísticas es que sustenta lo aseverado el ministro Jalkh?